Sin métrica simetría

Cuánta profundidad cabe en un hoyo

¿Los que calcula la pala que lo cavan, las raíces que lo abren, la aguja que lo penetra?

su vacío lo revela tanto como la materia que lo llena. 

Pero si se quiere una cuenta más precisas 

de esas que dejan tranquila la cabeza

basta contemplar el brote  vuelto tallo, abierto en ramas que se besan con el sol a pleno día

o contar los propios pasos, peldaño a peldaño, 

de la escalera de piedra en caracol que le rodea

y cuyo fondo está adornado con un ramo de violetas hydrangeas

tan solo honradas por pequeños seres voladores 

cuyos repetitivos giros reproducen danzas sufis a ras de tierra 

brazos abiertos expandiendo a la redonda el galopar del corazón humano

hasta olvidar el mismo mareo que invade a quien al borde del precipicio 

contemplando la escena se queda, sintiendo el latir en su garganta.